Ángela Holguín viajó a Caracas como enviada del presidente Santos. “Estoy aquí para expresar nuestra solidaridad”, dijo. La relación no siempre fue buena

“Mi venida acá también es para transmitir toda la solidaridad al gobierno venezolano, al pueblo y rogar por la salud del presidente Chávez", dijo la representante colombiana tras sostener una reunión con su par Elías Jaua, donde fue tratada, entre otros temas, la situación de la extensísima frontera colombo-venezolana.

Ángela Holguín –la misma que logró recuperar la relación en 2010- aseguró: "Los acompañamos permanentemente por este momento difícil que atraviesan. (...) Esperamos que se recupere y hemos tenido noticias de que ha tenido una mejora. Eso es lo que el gobierno de Colombia quiere expresar de todo corazón".

El presidente de Colombia trabajó duro para recomponer las relaciones bilaterales con su vecino. Los vínculos con Venezuela se resquebrajaron durante las presidencias de su antecesor, Álvaro Uribe. Una gestión que el actual mandatario acompañó desde diferentes puestos, incluso como el ministro de Defensa.

La situación con Venezuela fue complicada.  A principios de julio de 2010, estalló la ruptura de relaciones diplomáticas. La escalada verbal entre Chávez y Uribe llegó a tal punto que el bolivariano movilizó tanques a la extensísima frontera común.

La denuncia incluía la supuesta existencia de más de 1.500 guerrilleros colombianos apostados en territorio venezolano. Santos ya había ganado las elecciones, el presidente saliente se iba del poder, pero se llevaba consigo una de las relaciones comerciales más importantes para el país. En agosto de ese año, no habían pasado cuatro días del cambio de gobierno, cuando el flamante presidente ya buscaba desmarcarse de su antecesor y decidió reunirse con Chávez y restablecer las relaciones diplomáticas con el enemigo del vecindario. Es más, de archienemigo de Colombia, el bolivariano pasó a ser el "nuevo mejor amigo" del ex ministro de Defensa de Uribe.