El diario explica que se busca la “despigmentación” de esos productos para poder venderlos antes de su ciclo habitual de cosecha y sacar más ganancias ante la demanda que tienen en el mercado nacional.

En concreto, arremete contra técnicas de maduración que incluyen “el uso indistinto de sustancias de origen químico” como el etefón, el flordimex y el carburo, esta última prohibida en la isla para esos fines.

Granma indica que el etefón, por ejemplo, está autorizado en la agricultura nacional para regular el crecimiento de algunos cultivos como la cañade azúcar y el tabaco, pero alerta sobre su uso no especializado ya que en la isla no se le admite como un madurador “poscosecha”.

“De ahí lo preocupante de esta práctica ya generalizada entre los vendedores en ciertos establecimientos y carretilleros (vendedores ambulantes de productos agrícolas)”, añade.

El periódico subraya las derivaciones ilegales de esas prácticas, ya que son sustancias controladas por las autoridades, por lo que cuestiona su desvío “para fines no autorizados” sin que se apliquen medidas y sanciones.

En cuanto a las consecuencias para la salud, señala que esos productos pueden ser inocuos en “dosificaciones adecuadas” pero cuestiona que en estos casos se estén empleando de ese modo.

En ese sentido, Granma llamó a las autoridades a establecer “normas que resulten eficaces para el control y vigilancia” en el empleo de esas sustancias y a “velar por algo tan imprescindible como la protección al consumidor”.