Dirigentes de la oposición denunciaron este lunes que partidarios del gobierno y la policía hostigaron a disidentes reunidos en una casa en Guantánamo, 900 km al este de La Habana, y a dos integrantes de las Damas de Blanco, agrupación de esposas de presos políticos.

El dirigente opositor Oswaldo Payá, premio Sajarov-2002, afirmó en un comunicado de prensa que seguidores del gobierno insultaron e intentaron ingresar a la vivienda en la que el domingo se reunían varios miembros de una pequeña agrupación política ilegal de la provincia de Guantánamo.

``Es un acto de repudio gigantesco (...). Pido al gobierno de España, a la Santa Sede, a la ONU y demás organizaciones para que exijan se detenga esta salvajada'', añadió el líder del ilegal Movimiento Cristiano Liberación.

Por su parte, Bertha Soler, una de las portavoces de las Damas de Blanco, esposas y familiares de presos políticos cubanos, afirmó que dos de sus miembros, Sonia Garro y Mercedes Fresneda, fueron detenidas violentamente el jueves por siete horas, cuando caminaban por una céntrica calle de La Habana con un cartel que decía ``Abajo el racismo y vivan los derechos humanos''.

A petición de la Iglesia, el gobierno suspendió el 1ro. de mayo el hostigamiento a las caminatas dominicales de las Damas de Blanco por la Quinta Avenida de La Habana, y en agosto contra Reina Tamayo, madre del preso opositor Orlando Zapata, quien murió en febrero pasado tras una huelga de hambre de 85 días.

No obstante, el 1ro. de agosto el presidente Raúl Castro advirtió en un discurso: ``La defensa de nuestras sagradas conquistas, de nuestras calles y plazas, seguirá siendo el primer deber de los revolucionarios''.

Cuba considera a los opositores mercenarios de Estados Unidos.