Con ayuda de EEUU, los kurdos le arrebataron a los yihadistas la mayor represa de Irak Imprimir
Escrito por Tomado de INFOBAE   
Lunes, 18 de Agosto de 2014 10:34

La aviación estadounidense fue una pieza clave para retomar el control del punto estratégico en la lucha contra el Estado Islámico. Obama informó oficialmente al Congreso de la ofensiva y Reuno Unido reiteró su ayuda

Las fuerzas kurdas, apoyadas por la aviación estadounidense, arrebataron este domingo la represa más importante de Irak a los yihadistas del Estado Islámico (EI), quienes a su vez se enfrentan a tribus sunitas en el oeste del país.

Por su parte, el ministro de Defensa británico, Michael Fallon, dijo el domingo en la prensa de su país que el rol asumido por el Reino Unido en Irak va más allá de lo que es estrictamente una misión humanitaria y podría durar meses.

"Esto no es simplemente una misión humanitaria", declaró Fallon. "Nosotros y otros países de Europa estamos decididos a ayudar al gobierno de Irak a combatir esta nueva y extremista forma de terrorismo que practica el EI (Estado Islámico)", añadió.

En el terreno, el EI debe enfrentarse a una contraofensiva de tribius sunitas en el oeste del país.

"La represa de Mosul ha sido completamente liberada", declaró Ali Awni, un responsable del principal partido kurdo, quien añadió que los combates se llevaban a cabo actualmente en Tal Kayf, una localidad en manos de los yihadistas a un centenar de kilómetros de la represa.

Aviones de Estados Unidos, que sirvieron de apoyo a las fuerzas kurdas para recuperar la represa de Mosul

Un responsable del ejército aseguró que los combates terminaron y señaló que algunas zonas eran inaccesibles a causa de las bombas colocadas por los insurgentes.

Las fuerzas kurdas habían lanzado el sábado una ofensiva para retomar el control de esa represa que suministra agua y electricidad a la mayor parte de la región y que cayó en manos de los yihadistas el 7 de agosto.

Estados Unidos, que inició sus bombardeos el 8 de agosto, lanzó en los dos últimos días 23 ataques aéreos con aviones y drones, 14 de ellos el domingo, que destruyeron vehículos militares y un puesto de control del EI.

El objetivo de estas acciones es apoyar "los esfuerzos humanitarios, proteger las infraestructuras importantes, al personal y las instalaciones de Estados Unidos en Irak, y ayudar a las fuerzas de seguridad kurdas", explicó el comando militar estadounidense en Oriente Medio y Asia Central.

Sólo el domingo se lanzaron 14 ataques aéreos, según el comando.

Por su parte, el presidente Barack Obama informó el domingo mediante una carta al Congreso estadounidense sobre estos ataques, lanzados "para apoyar a las fuerzas iraquíes con vistas a recuperar la represa de Mosul".

Irak está sumido en el caos desde que los yihadistas sunitas lanzaron una ofensiva el 9 de junio al norte de Bagdad, que se extendió a principios de agosto a las localidades próximas a la región autónoma del Kurdistán.

Tras el lanzamiento de esta ofensiva, las fuerzas kurdas se hicieron con el control de varias zonas del norte del país abandonadas por las fuerzas iraquíes y lanzaron a principios de julio un proyecto de referéndum de independencia del Kurdistán.

Este proyecto recibió un jarro de agua fría por parte del jefe de la diplomacia alemán, Frank-Walter Steinmeier, quien se mostró contrario a "un estado independiente de los kurdos" para no desestabilizar más el país.

Contraofensiva en el oeste iraquí

En la provincia de Al Anbar, al oeste de Bagdad y de mayoría sunita, una coalición de más de una veintena de tribus apoyada por las fuerzas de seguridad continuaba con su ofensiva lanzada el viernes contra los yihadistas, que controlan numerosos sectores de esta región.

Un kurdo iraquí inspecciona un rifle en un mercado de armas en Arbil, la capital de la región autónoma kurda

Según el comandante de policía, Ahmed Sadag, estos combatientes expulsaron a los yihadistas de zonas bajo su control al oeste de Ramadi, la capital provincial, y los combates continuaban en otras zonas.

Ante el avance yihadista hacia el Kurdistán, la comunidad internacional se movilizó para ayudar a las decenas de miles de desplazados en campamentos del norte del país, a menudo en condiciones lamentables.

Los yihadistas entraron el viernes en la localidad de Kocho, a más de 150 kilómetros al suroeste de Mosul, donde mataron a unas 80 personas, en su mayoría yazidíes, indicó el responsable iraquí Hoshyar Zebari, quien denunció una "masacre".

Kocho está situada cerca de Sinjar, una ciudad que el EI tomó el 3 de agosto, y de donde huyeron miles de civiles, muchos de la minoría kurdohablante y no musulmana de los yazidíes, considerados "herejes" por los yihadistas.

Para detener este avance, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas adoptó una resolución para impedir el reclutamiento y la financiación de los yihadistas en Irak y Siria, mientras que la Unión Europea apoyó la entrega de armas a los combatientes kurdos, como ya hacen Francia y Estados Unidos.

AFP