G20: Los emergentes se harán oir Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Martes, 01 de Noviembre de 2011 19:27

América Latina llega al cónclave con la voz política de Brasil y con críticas a la forma en que la UE y EEUU manejan la crisis. El bloque europeo presentará en la cumbre su propuesta para solucionar los problemas financieros

Crédito foto: AP

Brasil, que ha adquirido un creciente protagonismo en los foros internacionales, se presentará en Cannes el 3 y el 4 de noviembre como una bisagra entre América Latina y China, India, Rusia y Sudáfrica, con los que forma el grupo BRICS. Esta agrupación tiene gran relevancia, ya que concentra más de la mitad de la inversión extranjera directa mundial, según recientes datos de la ONU.

Los países latinoamericanos, que tienen como miembros del G-20 a la Argentina, Brasil y México, acordaron sus posiciones frente a esta cumbre en una reunión celebrada en Montevideo el pasado 18 de octubre, en la que reiteraron que la crisis es "responsabilidad" de los países desarrollados.


En la capital uruguaya decidieron exigir un mayor peso de las economías emergentes en las decisiones mundiales y se sugirió pedir un asiento en el G-20 para la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi), con el fin de reforzar la presencia de una región que hasta ahora resiste a los embates de la crisis con el crecimiento de la economía y con inversiones sociales, a diferencia de lo que sucede en la UE.

La posición de América Latina sobre la actitud para mostrar en el foro de Cannes coincide en general con las de China, India, Rusia y Sudáfrica, países que también están a favor de una reforma de los organismos internacionales que garantice más poder a los emergentes.

"La concentración del poder en las instituciones multilaterales, que hoy representan principalmente los países desarrollados, es obsoleta y muestra un orden internacional que ya no existe", dijo Angola la presidente brasileña, Dilma Rousseff hace unos días.

México, que asumirá en 2012 la presidencia del G-20,  considera a su vez que el foro de Cannes debe concretar acciones para asegurar la estabilidad y el crecimiento, pues "es importante actuar con urgencia y en forma coordinada para restaurar la confianza y estabilizar los mercados".

Los líderes europeos, por su parte, llegan a la cumbre de G-20 con el supuesto intento de encontrar una solución a la crisis de la eurozona. La UE, de hecho, aprobó el jueves pasado un plan contra la crisis del euro basado en tres pilares: una recapitalización bancaria de 100 mil millones de euros, una condonación del 50% de la deuda griega, y el respaldo del fondo de rescate europeo, que podría tener a disposición hasta un billón de euros.

La UE, con Sarkozy y la canciller Angela Merkel a la cabeza, quiere proponer también, o eso dice, un control al sector financiero, a quien ya se le ha otorgado en los últimos tres años 4,6 billones de dólares. En cambio, el Reino Unido ya ha mostrado su desacuerdo con esta iniciativa.