"Una ola represiva recorre Cuba con renovada brutalidad. Alcanza de diversas maneras a opositores y disidentes, así como a intelectuales, cineastas, artistas, escritores, científicos, periodistas, abogados y todo aquel que profese una opinión incómoda para quienes monopolizan todo el poder político, económico y militar en la Isla", denunció la Foundation For Human Rights in Cuba (FHRC) en un comunicado fechado este martes 21 de marzo.

Asimismo, puntualizaron que la represión no es una estrategia que vaya a dejar saldo favorable al régimen: "puede lograr estabilidad al corto plazo, pero no constituye una estrategia que proporcione seguridad y gobernabilidad a mediano y largo plazo".

FHRC señaló que a pesar de que la oposición cubana lleva cuatro décadas "apegada a una estrategia no violenta para la transformación constructiva de la sociedad", el régimen responde con "violencia que ahora se incrementa".

"Los represores parecen haber recibido luz verde desde la cúspide del poder para intimidar a cualquiera a cómo dé lugar", denunciaron.

FHRC hizo un recuento de los últimos actos represivos contra mujeres de las Damas de Blanco o el Movimiento Dignidad, contra los abogados de Cubalex, los arrestos de activistas de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) y del médico Eduardo Cardet, coordinador del Movimiento Cristiano Liberación (MCL).

"Amenazan a una joven activista del Movimiento Dignidad y su hijita con exponerlas a ser violadas por un criminal recién liberado de manera arbitraria, (…) allanan el consultorio legal gratuito de un grupo de abogados, arrastran y golpean a Damas de Blanco en distintos puntos de la Isla, encarcelan arbitrariamente a un líder del MCL o a decenas de activistas de la UNPACU", precisaron.

Además, condenaron la "censura" de filmes y las recientes "amenazas" y el "acoso" al periodista de izquierdas, Fernando Ravsberg.

"Los cuentapropistas tampoco han escapado a esta renovada vocación represiva", añadió el comunicado.

FHRC condenó, también, "el juego" de Raúl Castro que "quiere continuar posando de reformista sin hacer reformas".

El general Castro "ha mostrado más interés en dejar instalados a descendientes y allegados al frente del desastre nacional. Nada de cambios; solo procura estabilidad".

"El clan Castro está persuadido, después de seis décadas, de que su reinado será eterno. Pero la realidad cubana no es hoy más sólida que la que aparentaban la RDA y la Unión Soviética a escasos años de su caída. Raúl Castro no ha ganado tiempo, lo ha despilfarrado. Y eso tendrá consecuencias", concluyó el comunicado.

DIARIO DE CUBA