Polémica en la oposición cubana por la enmienda de Mario Díaz Balart para limitar viajes a Cuba Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Sábado, 25 de Junio de 2011 11:41

Desde La Habana, la opositora Martha Beatriz Roque restó importancia a la enmienda del comité y dijo que en estos momentos Obama "debe estarse cuestionando su política hacia Cuba desde 2009, y darse cuenta de que esto no ha dado ningún fruto".

"Baste decir que Alan Gross continúa preso", apuntó la expresa política.

El Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes aprobó el jueves la enmienda del legislador Mario Díaz Balart, revocando orden de Obama para viajes a Cuba y remesas de cubanos con familiares en la Isla. La normativa aún debe ahora pasar por el pleno del Legislativo.

En la opinión de Beatriz Roque, que los cubanoamericanos disminuyan las remesas no es ni bueno ni malo, "en tanto la Isla está pasando una situación gravísima, que no tiene nada que ver con Estados Unidos ni con el embargo".

Por su parte, otros disidentes y exiliados cuestionaron este viernes la "actitud extremista" del congresista Mario Díaz-Balart, quien presentó una enmienda para revertir la flexibilización de viajes y remesas a Cuba que ordenó en 2009 el presidente Barack Obama.

"Es un error la actitud extremista de nuestro compatriota (Mario Díaz-Balart), porque esa línea traerá más dolor al pueblo de Cuba", señaló en declaraciones a DIARIO DE CUBA el presidente de la Unidad Liberal de la República de Cuba, Héctor Palacios.

Según el expreso político y miembro del Grupo de los 75, "volver a las políticas de (George W.) Bush, volver a aislar al pueblo cubano, es un grave error".

"Y el hecho de que los cubanoamericanos no tengan libertad para venir a ver a su familia, es un error peor todavía", remarcó.

En 2009, Cuba recibió unos 1.200 millones de dólares en términos de remesas, más de la mitad proveniente de Estados Unidos. Según la organización Diálogo Interamericano, unos 750.000 hogares reciben dinero del exterior.

Para el activista Dagoberto Valdés, las medidas de Obama "fueron correctas", por lo que derogarlas significaría "un paso atrás".

"Los derechos humanos son universales. No puedo tener un rasero para el derecho a viajar de los cubanos de la Isla y otro para los cubanoamericanos o americanos", afirmó el director de la revista Convivencia.

En la misma cuerda se pronunció el sacerdote José Conrado Rodríguez, para quien "lo que hay que hacer es favorecer los contactos entre los cubanos de dentro y de fuera".

"Yo pediría que no se pongan límites a las relaciones entre cubanos", señaló el párroco de la Iglesia Santa Teresita de Jesús, en Santiago de Cuba.

Exilio: Silencios y críticas

En Miami, la Fundación Nacional Cubano Americana evitó comentar la enmienda, mientras que el excandidato demócrata al Congreso, Joe García, acusó a Mario Díaz-Balart de "profunda ignorancia sobre la realidad de Cuba y el exilio".

"Quieren aferrarse al fracaso de una política", cuestionó García.

El expresidente del Partido Demócrata en el Sur de la Florida dijo que este viernes habló sobre el tema con la Casa Blanca y el Departamento de Estado.

"Ellos (la administración) se opondrán a la enmienda, porque no cambiarán una política que ha sido exitosa", aseguró García.

Añadió que "estas cosas suceden" (la enmienda Díaz-Balart) "porque una inmensa mayoría del exilio, que piensa de otra manera, no vota".

"Y entonces la derecha actúa contra los intereses de la mayoría, contra el liderazgo de la disidencia interna", sentenció.

Marcelino Miyares, presidente del Partido Demócrata Cristiano de Cuba (PDC), calificó de "vergonzosa" la decisión del Comité de Asignaciones del Congreso.

"Creo muy lamentable que cubanos de aquí quieran echar el reloj hacia atrás en la política de aislamiento, que no distingue entre el Gobierno y el pueblo, que es quien ha sufrido las consecuencias de esa política", denunció el líder democristiano.

En Washington, el Cuba Study Group dijo en un comunicado que es "lamentable" que el representante Mario Díaz-Balart "continúe utilizando el sufrimiento de las familias cubanas como arma en la promoción de una política fallida en contra del régimen".

"La revolución cubana ha traído bastante sufrimiento a las familias y las autoridades de EE UU deben ofrecer una política que no contribuya a ese sufrimiento", señaló la organización que codirige Carlos Saladrigas.

El proyecto de ley aún tiene un largo camino que recorrer, ya que debe ser debatido y votado en el pleno de la Cámara de Representantes, y el Senado también tiene que estudiar su propia versión.

Última actualización el Sábado, 25 de Junio de 2011 11:54