CERRADO DEBATE ELECTORAL ENTRE DILMA ROUSSEFF Y JOSÉ SERRA EN LA TV BRASILEÑA Imprimir
Escrito por Indicado en la materia   
Lunes, 18 de Octubre de 2010 10:34

Rousseff y Serra se enfrentaron anoche por la televisión y dejaron de lado el tema ecologista, pese a que horas antes la tercera candidata, Marina Silva, se declaraba neutral frente al ballottage del 31 de octubre.

La candidata oficialista Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), insistió en fustigar el pasado de Serra, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) como uno de los arquitectos del plan de privatizaciones del gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002), al que comparó con los niveles sociales de la gestión de Luiz Lula da Silva, según la agencia italiana Ansa.
El postulante opositor José Serra por su parte pidió "mirar al futuro" y dejar de comparar los dos gobiernos, pero fue sorprendido porque la ex jefa de ministros y ex ministra de Energía de Lula lo acusó de perjudicar a la empresa estatal Petrobras durante su gestión en el gobierno estadual de San Pablo.

El candidato opositor, en cambio, se mostró dispuesto a lanzar una "guerra contra las drogas" y reiteró sus acusaciones contra Bolivia por ser uno de los principales orígenes de la cocaína que entra en Brasil.

Rousseff arremetió contra Serra acusándolo de planear liberalizar la explotación petrolera submarina a empresas extranjeras, algo que impide la nueva ley de petróleo del gobierno de Lula.

La candidata oficialista dijo que Serra en el gobierno de San Pablo se interpuso para que la estatal Petrobras no pudiera comprar a la distribuidora Gas Brasiliano, subsidiaria en el estado de San Pablo de la petrolera italiana Eni.

"Petrobras hizo la mejor oferta para adquirir a Gas Brasiliano (que distribuye gas en el norte de San Pablo) y el gobierno paulista se opone a la venta. Segunda quedó una empresa japonesa y tercera una privada nacional", resaltó.

Serra respondió diciendo que la decisión de frenar la venta de Gas Brasiliano a la estatal petrolera Petrobras "es de una decisión de la agencia controladora".

El candidato opositor afirmó que su avance en las encuestas para el balotaje del 31 de octubre "tuvo repercusión en el mercado financiero y las acciones de Petrobras subieron luego de varios días de caída". La platea de asesores de Rousseff estalló en carcajadas.

Serra negó tener en pauta privatizaciones, luego de que Rousseff le recordó que fue el responsable por la desinversión estatal en las empresas eléctricas estatales durante su gestión como ministro de Planificación de Cardoso.

Sin embargo, defendió la privatización en el sector de telefonía. "Hoy un mecánico, un carpintero tendrían que ir a la esquina a buscar un teléfono público para recibir encomiendas de trabajo", ejemplificó el ex gobernador de San Pablo.

También los escándalos de supuesta corrupción denunciadas por la prensa que salpicaron a los candidatos en las últimas semanas fueron abordados.

Rousseff declaró "indignación" por la renuncia de Erenice Guerra, la jefa de ministros de Lula que era su número dos en la Casa Civil acusada de tráfico de influencia por haber puesto a hijos y amigos de sus hijos como asesores.
"Erenice se equivocó.

Con mucha indignación no concuerdo con la contratación de parientes. Ocurre que nosotros investigamos los casos y los enviamos a la Policía Federal", declaró Rousseff sobre el caso de su principal colaboradora desde 2002 que renunció dos semanas antes de las elecciones del 3 de octubre.

Por su parte, el ex gobernador de San Pablo, Serra, negó tener conocimiento del caso de Paulo Souza, su ex colaborador de la empresa paulista acusado por su propio partido de haber robado unos 3 millones de dólares de la campaña recaudados en forma irregular.

"No es un tema del gobierno. Es un tema de campaña que yo no sabía. Yo soy la víctima de esto", se justificó Serra sobre Souza, quien estuvo a cargo de la construcción de la obra vial circunvalación en San Pablo y es investigado por sobrefacturación por la Policía Federal.

Pero se negó a responder por qué contrató como asesora en el gobierno de San Pablo a la hija de Paulo Souza.

En un debate en el que no estuvo presente la polémica por el aborto, que dominó gran parte de la campaña, incluso con sacerdotes y obispos involucrados en ella, Serra apuntó al control de las fronteras y declaró "la guerra contra las drogas".

"La guerra contra las drogas fue dejada de lado y en mi gobierno vamos a combatir a las drogas. El propio presidente de Bolivia, Evo Morales, amigo del gobierno, admitió el contrabando de drogas que viene a Brasil. No se le dice nada a Bolivia", dijo Serra.

Rousseff, en cambio, afirmó que la droga proviene de Colombia y de otras naciones vecinas y fustigó el tratamiento médico hacia los drogadependientes en el estado de San Pablo.

Al final, Serra convocó a la "unión nacional" y a "no mirar a los rivales como si fueran enemigos", tras recordar su origen en un hogar de inmigrantes trabajadores de San Pablo.

Rousseff, por su parte, declaró: "Tengo la honra de ser respaldada y estar en el mismo proyecto del más grande presidente de la República que haya existido", por Lula.

"Así como con Lula en 2002 la esperanza venció al miedo, ahora el amor y la esperanza van a vencer al odio", subrayó.

 

Fuente: Télam

Última actualización el Lunes, 18 de Octubre de 2010 10:42