De acuerdo con reportes de prensa, Gustavo Hernández García, director de Pemex Exploración y Producción (PEP, subsidiaria de la petrolera estatal), ya ha tenido reuniones con representantes Chevron, Shell, Exxon, British Petroleum, Petrobras, Ecopetrol, Petronas, PetroChina y Petróleos de Venezuela, entre otras compañías.

"Hemos visto como 80 empresas que tienen interés. Nos interesa buscar socios que no solo sean exitosos en aguas profundas, sino que sean exitosos en aguas profundas en el Golfo de México", sostuvo Hernández.

Indicó que será la Comisión Nacional de Hidrocarburos el organismo que decidirá al socio ganador según el proceso de licitación, aunque Petróleos Mexicanos (Pemex) podrá sugerir que se evite alguna compañía que no tenga experiencia en el Golfo de México.

El directivo comentó que Pemex tuvo contacto también con algunas empresas mexicanas que han manifestado interés, y que incluso el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) ha solicitado un mayor acercamiento.

En el marco de la aplicación de la reforma energética impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto en 2013 y cuya legislación reglamentaria fue promulgada la semana pasada por el mandatario, el Gobierno otorgó a Pemex 83% de las reservas probadas y probables de petróleo del país y 21% de los recursos prospectivos.

Entre los campos asignados, Pemex ya identificó diez proyectos en asociación con firmas privadas a consolidar en 13 meses a partir de noviembre.

En un encuentro reciente con la prensa internacional, la subsecretaria de Hidrocarburos de la cartera de Energía, Lourdes Melgar, dijo que con la apertura del sector derivada de la reforma energética se espera que Pemex aumente su producción de los actuales 2,5 millones de barriles diarios de crudo a 3 millones hacia 2018 y a 3,5 millones para 2025.

Se prevé que una parte importante del incremento de la producción venga de las asociaciones de Pemex con otras compañías, así como de la participación de empresas petroleras no necesariamente asociadas con la estatal mexicana.

"En un inicio veremos una tendencia en que habrá un dominio de Pemex en la producción, que se irá reduciendo a medida que pase el tiempo. Si pensamos en un plazo de unos 15 años, esperaríamos que un 30% de la producción adicional viniera de empresas distintas de Pemex", puntualizó.