Los mandatarios dieron nostálgicos discursos sobre el brasileño. Morales lo postuló a secretario de la ONU. Piñera comparó su despedida con la de Pelé

¿Será este, por fin, el último homenaje a Lula da Silva? Sus pares ya lo habían glorificado en las reuniones de Unasur y de los países iberoamericanos. El presidente más popular de la historia de Brasil dejará el poder a fin de año y los mandatarios de la región no ahorran palabras de enaltecimiento. Todos destacaron el papel que jugó en la integración latinoamericana y le pidieron que no abandone la actividad política.

 

"Quiso el destino que este sea el último compromiso de mi agenda internacional como presidente, y tiene un significado especial para mí", se emocionó Lula en Foz do Iguazú, ciudad de su país. "Salgo de aquí con la certeza de que valió la pena el trabajo que todos juntos realizamos. Tuve muchas alegrías en mis relaciones con otros jefes de Estado, pero ninguna como el Mercosur".

 

Evo Morales encabezó la delegación de Bolivia, invitada a la Cumbre como país asociado. Fue el más enfático a la hora de ensalzar a Lula: lo postuló para Secretario General de las Naciones Unidas. "Habrá que hacer campaña, pero qué mejor que un dirigente sindical para representarnos dignamente en la ONU". Los presidentes de Argentina, Uruguay y Paraguay recibieron con calurosos aplausos la propuesta. El brasileño, que manifestó varias veces que ese cargo es para "burócratas", sólo sonrió.

 

El uruguayo José Mujica también subrayó, en su habitual estilo campechano, la proyección internacional de su colega. "Lula tiene mucha carta que jugar al trote. Sin título, es nuestro embajador plenipotenciario en el concierto de este mundo. Estas cosas no se designan, las crea la vida, Tontos e idiotas si no nos damos cuenta".

 

La argentina Cristina Kirchner, tal vez la más cercana a Lula, prefirió decirle "hasta pronto" que despedirlo. "No puedo menos que emocionarme. Las cosas del destino, su última reunión internacional es en casa, en América del Sur. Todo un símbolo de la elección que hemos hecho los que aquí estamos sentados, de pertenencia e identidad, sin desconocer la globalización a la que queremos sumarnos desde nuestra propia visión".

 

La nota de color la dio Sebastián Piñera. Luego de calificar al brasileño como un "hombre imprescindible", el chileno aludió a la emotiva despedida que el fútbol de Brasil le dio a su crack Pelé en el estadio Maracaná: "Fica, Lula, fica" ("Quédate, Lula, quédate"). No fue más que una expresión de deseo: la cuenta regresiva comenzó y Dilma Rousseff está lista para asumir en el Palacio de Planalto.