Mientras Michelle Bachelet apuesta a ganar en primera vuelta este domingo, Evelyn Matthei ansía llegar al ballotage. Con un gran despliegue militar, 13,5 millones de ciudadanos están habilitados para elegir al gobernante del período 2014-2018

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Chile elegirá este domingo a su nuevo presidente en unas elecciones que cuentan con la novedad del voto voluntario, que decidirá además la renovación total de la Cámara de Diputados y la mitad de Senadores, incluyendo 257 consejeros regionales.

Con la apertura de las mesas a partir de las 8:30 local, 13.573.143 chilenos están habilitados a elegir entre 9 candidatos presidenciales. Las Fuerzas Armadas se encargarán de la seguridad de los centros de votación con 18.562 soldados a nivel nacional y Carabineros controlarán el orden en la vía pública de la Región Metropolitana de Santiago con 3.197 agentes.

El director del Servicio Electoral de Chile (Servel), Patricio Santamaría, informó que las proyecciones de participación electoral van de casi 7,4 millones de votos, equivalentes al 55,3 por ciento del padrón, y de ocho a nueve millones.

El Servel enfrentará este domingo "su prueba de fuego" al estar por primera vez a cargo de entregar cómputos "rápidos y certeros", tarea que antes estaba en manos del Ministerio del Interior. "Este es el desafío más grande que ha tenido el Servicio Electoral en su historia", declaró Santamaría.

La incertidumbre general está marcada por la inscripción electoral automática y la participación de ciudadanos en un país donde hasta enero de 2012 era obligatorio sufragar.

El análisis común es que si concurre poca gente a votar, aumentan las posibilidades de que la favorita Michelle Bachelet gane en primera vuelta frente a sus rivales Evelyn Matthei, la candidata elegida por el presidente Sebastián Piñera; el ex socialista Marco Enríquez Ominami y el economista independiente populista Franco Parisi.

Otros candidatos, pero con bajo apoyo popular según los sondeos, son el economista Marcel Claude, apoyado por el Partido Humanista; el cientista político, Ricardo Israel, del Partido Regional Independiente; la dirigente poblacional del Partido Igualdad, Roxana Miranda; el ecologista Alfredo Sfeir y el ex demócrata cristiano Tomás Jocelyn Holtz.

En caso de que la ex mandataria entre 2006 y 2010, que incorporó diversas agrupaciones de izquierda y al partido Comunista en su coalición la Nueva Mayoría, no obtenga el 50 por ciento más un voto, deberá medirse el 15 de diciembre en ballotage con el candidato más votado entre sus contrincantes.

Sin embargo, es un panorama difícil de imaginar debido a que en las primarias (también una medida inédita practicada este año), Bachelet recibió 1.562.563 votos, de los tres millones que votaron, y duplicó la suma de los 2 candidatos de la derecha.

La última encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP) arrojó que entre el 13 de septiembre y el 14 de octubre hubo un 47% de adhesión para Michelle Bachelet seguida por Matthei con el 14%. Atrás se ubicó Parisi con el 10% y Marco Enríquez Ominami con el 7%.

En tanto, el ex presidente socialista Ricardo Lagos refutó las descalificaciones de la derecha hacia la candidatura de Bachelet: "No es una izquierdización, es un nuevo ciclo político y económico".

Ante las demandas de una ciudadanía que en 2011 salió a las calles para pedir educación gratuita, pública y de calidad, junto a reformas tributarias, de salud, pensiones y una nueva Constitución, Lagos explicó que "hay una nueva realidad de la sociedad chilena".