El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó hoy que durante la visita que hará a Teherán “intentará convencer a Irán de no avanzar hacia una bomba nuclear” y que seguirá defendiendo el uso pacífico de la energía nuclear.

Lula tiene previsto hacer una visita oficial a Irán el próximo 15 de mayo y reiteró hoy que su Gobierno considera que “todavía no se ha dialogado lo suficiente” como para aprobar las sanciones contra Irán que promueven Estados Unidos y otros países.

El Gobierno brasileño, a través de diversos interlocutores, ha reconocido más de una vez que no tiene “garantías formales” de que el programa nuclear de Irán no tenga objetivos bélicos, así como ha insistido en que el desarrollo de la energía atómica con fines pacíficos es “un derecho” de todo país.

En una rueda de prensa junto al presidente venezolano, Hugo Chávez, quien hizo hoy una visita oficial a Brasil, Lula incidió en esa tesis y reiteró que está “dispuesto a hacer todo lo necesario para garantizar el derecho de Irán a un desarrollo nuclear pacífico”.

También sostuvo que Brasil “no trabaja con la hipótesis de que Irán pueda ser atacado o invadido por Estados Unidos” o algún otro país, una posibilidad que, según explicó, “no se ha comentado en ningún tipo de foro”.

Asimismo, descartó que Brasil pueda ser depositario del uranio iraní en caso de que se aceptara la propuesta de que Irán envíe el material a un tercer país enriquecido al 3,5 por ciento y lo recupere después, ya al 20 por ciento.

Esa propuesta fue presentada por EE.UU., Rusia y el Reino Unido el año pasado, y aunque Irán la rechazó en su momento, es defendida por Brasil y Turquía como una posible base para la retomada del diálogo.

Lula explicó que “Brasil no trabaja con la hipótesis de ser depositario del uranio de Irán”.

El canciller brasileño, Celso Amorim, dijo este martes en Irán que el depositario podría ser Turquía, ya que “es un buen interlocutor, miembro de la OTAN y amigo de Irán”.

Vía EFE