Por Jorge Hernández Fonseca.- 

En todo caso, el panorama actual y su desenlace esta firmemente en las manos de la administración norteamericana, ya sea en la solución del actual problema humanitario y migratorio, sea del lado del pedido por financiamientos para mantener a flote la dictadura.

Éxodo 2015: Un análisis

Jorge Hernández Fonseca

30 de Diciembre de 2015

La complejidad de la situación política cubana actual amerita un análisis detallado de los sucesos asociados los factores socio políticos más importantes actuando en la isla: por un lado, el acercamiento de EUA a la dictadura cubana, velando (y temiendo) básicamente por su estabilidad, y por otro el nuevo éxodo de cubanos, esta vez atravesando toda Centroamérica.

En ambos factores expuestos hay una fuerte división en el seno de la oposición política cubana, tanto en la isla como en el exilio. El acercamiento de EUA a la Cuba es lógicamente aceptado o rechazado por la oposición con argumentos válidos por ambas partes. El éxodo sin embargo es básicamente “no apoyado” por amplios sectores del exilio, debido a actitudes, declaraciones y el posicionamiento de algunos de los participantes de la estampida: hay demasiadas camisetas con la imagen de Che Guevara, tatuajes del dictador y personas que “no les interesa la política”.

Todo lo anterior complica adicionalmente el análisis de lo que debería ser un asunto menos complejo, debido a la interacción de factores envueltos en la cuestión, por lo que vamos a exponer los elementos que se entienden más clarificados con vistas a concatenar factores:

Hay determinado consenso en señalar al régimen cubano como incentivador del actual éxodo por vía terrestre, ya que por mar había sido amenazado por EUA de señalarlo como culpable del incentivo. Es muy probable que la estrategia castrista sea presionar a EUA para conseguir alguna prebenda en sus conversaciones y que no se acepten más médicos cubanos en EUA, aunque no está muy claro todavía si el objetivo es la eliminación de la Ley de Ajuste Cubano.

La actual crisis humanitaria en Costa Rica provocada por su diferendo con Nicaragua está siendo ampliamente aprovechada por la dictadura castrista para conseguir sus objetivos, moviendo sus aliados en Quito y Managua, ante unas conversaciones con EUA en las que la isla hará finalmente su “petición” a Norteamérica y mostrará finalmente sus cartas escondidas.

Hay otro factor ajeno a la dinámica de los acontecimientos, pero que pudiera influir en su desenlace: es el “factor Macri” y su intempestivo triunfo electoral en Argentina. Esta victoria influiría en las venideras elecciones venezolanas, acelerando la descomposición del régimen chavista lo que pudiera dejar a la dictadura cubana sin financiamientos, incentivando la isla a jerarquizar este factor en sus conversaciones con EUA a cambio de la solución del éxodo.

En todo caso, el panorama actual y su desenlace esta firmemente en las manos de la administración norteamericana, ya sea en la solución del actual problema humanitario y migratorio, sea del lado del pedido por financiamientos para mantener a flote la dictadura.

El principal negociador norteamericano de las conversaciones Cuba-EUA previo al 17D ha expresado que lo único negociado entonces fue el intercambio de prisioneros y que la política actual de Washington hacia la Habana había sido “un cambio unilateral de política”. Veamos si es ahora que EUA se decide a negociar con la isla “financiamientos por democracia”, lo que pudiera convertir este éxodo provocado por Castro en el inicio del fin de la dictadura cubana.

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