El plan, que cuenta con apoyo de ambos partidos, fue presentado en enero por el legislador republicano por Florida y su colega demócrata por Maryland Chris Van Hollen. Las siglas corresponden a las palabras en inglés para “Defender las elecciones de amenazas estableciendo líneas rojas”.
Se basa en el conocimiento comprobado por la inteligencia estadounidense de que Rusia manipuló los canales de las redes sociales y hackeó comités de campaña política y juntas electorales en EE.UU. para socavar el proceso democrático en 2016.
"Yo no creo que Vladimir Putin interfirió en nuestras elecciones: yo sé que lo hizo. La única forma de evitar que vuelva a hacerlo es que comprenda que el precio es mayor que el beneficio que sacará de ello”, dijo el senador cubanoamericano sobre el tema en un video divulgado por su oficina.
"La forma en que quiero hacerlo es a través de una ley que ofrecí hace meses: se llama Ley DETER. Hace tres cosas: define qué es la interferencia; establece que en un plazo de 30 días después de una elección, el Director de Inteligencia Nacional debe emitir un informe acerca de si Rusia intervino o no en nuestros comicios, sean los de 2018 u otros; y luego, si interfirieron, define muy clara y específicamente sanciones muy severas contra Vladimir Putin y Rusia. Para que sepa de antemano que, si lo hace, va a pagar un alto precio".
La legislación prevé que las sanciones deben implementarse no más de diez días después de la determinación del Director de Inteligencia Nacional.
Las medidas se dirigen a los principales sectores de la economía rusa, entre ellos finanzas, energía, defensa y metales y minería.
Todas las figuras políticas u oligarcas rusos prominentes, identificados en un informe requerido por la Ley Contra los Adversarios de Estados Unidos de 2017, serían incluidos en una lista negra para bloquear sus activos e impedir su ingreso en Estados Unidos.
"Disuasión, creo que es la clave para evitar que esto suceda nuevamente", señaló Rubio.
Estados Unidos celebrará en noviembre sus elecciones de medio mandato (del presidente), en las cuales se someterán a las urnas los 435 escaños de la Cámara de Representantes, 35 de las 100 curules del Senado, 39 gobernaciones estatales y territoriales y muchos otros cargos estatales y locales.
El proyecto de Rubio alerta también sobre posibles ciberamenazas similares por parte de China, Irán y Corea del Norte.
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