El Gobierno de EEUU anunció que a partir de este miércoles los estadounidenses que viajen a Cuba no podrán alojarse en hoteles estatales, en una medida que el Departamento de Estado hará pública el jueves a través de un documento oficial.

La disposición prohíbe además que los visitantes adquieran como souvenirs cantidades determinadas de tabaco y ron producidos en Cuba, una de las medidas aprobadas durante la Administración de Barack Obama. El Departamento del Tesoro indicó a la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) que prohíba que "cualquier persona sujeta a la jurisdicción de los EEUU" contrate su "alojamiento, el pago del alojamiento o la realización de cualquier reserva suya o a nombre de un tercero para alojarse en cualquier propiedad en Cuba que el Secretario de Estado haya identificado como propiedad o controlada por el Gobierno cubano, un funcionario del Gobierno de Cuba (...) un miembro del Partido Comunista de Cuba" o "un pariente cercano".

Por ello, a partir de la promulgación de la medida, las empresas de viajes y turismo sujetas a la jurisdicción de los EEUU no podrán realizar reservas en estas propiedades, de las que el Departamento de Estado publicará un listado actualizado.

Ese listado incluirá los nombres, direcciones u otros detalles de identificación de las propiedades vetadas, accesible a través de la web del Departamento de Estado.

A partir de ahora, los estadounidenses tendrán como única opción hospedarse en casas particulares de cuentapropistas que no tengan vínculos con funcionarios oficiales.

Asimismo, en lo adelante queda eliminada la autorización existente para la realización de congresos, encuentros profesionales, clínicas, talleres, competiciones atléticas o no atléticas y exhibiciones.

La OFAC deberá emitir "licencias específicas, caso por caso", para transacciones que tengan que ver directamente con la participación de alguna organización o individuos de EEUU interesados en realizar esta clase de actividades en Cuba.

Según lo dispuesto por Washington, solo los viajes para la realización de actividades deportivas seguirán autorizados a través de licencias generales del Departamento del Tesoro.

Las nuevas medidas endurecen las sanciones de Washington sobre La Habana y eliminan varias de las decisiones del periodo de acercamiento entre ambos gobiernos, puestas en práctica durante el último año de la Administración Obama.

Además, complementan otras sanciones aplicadas en junio pasado, cuando la Administración Trump incluyó a la financiera de los militares cubanos FINCIMEX en una lista de entidades vinculadas al Ejército cubano con la que individuos y empresas sujetas a la jurisdicción de los EEUU tienen prohibido realizar negocios.

DIARIO DE CUBA