El ex preso político Arturo Pérez Alejo, excarcelado hace dos meses por el gobierno cubano, llegó el lunes a Miami desde Madrid: el primero de una veintena de ex prisioneros que han manifestado su intención de trasladarse de España a Estados Unidos.

Por ENRIQUE FLOR

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"Me siento feliz de haber llegado a esta tierra de libertad'', dijo Pérez de Alejo. ‘‘Quiero reiniciar mi vida aquí junto a mi familia y seguir firme en mi causa para lograr la libertad de nuestro pueblo''.

Tras un viaje de 10 horas y otras tres de entrevista con autoridades de inmigración, Pérez de Alejo, junto con su esposa Moraima León y su hija menor Claudia, de 15 años, se reencontró con amigos y familiares en el Aeropuerto Internacional de Miami.

El más emotivo de los encuentros fue con su hija mayor, Aylín, de 28 años, quien vive en Miami desde hace cinco. No la veía desde el 2005, cuando ella lo visitó en una prisión en la provincia occidental de Pinar del Río.

León no pudo contener las lágrimas al ver por primera vez al hijo de 10 meses de Aylín.

"Hoy estamos aquí, en Miami, empezando una nueva vida'', afirmó Pérez de Alejo, de 59 años, quien vestía camisa a cuadros de manga larga y pantalón azul.

Pérez de Alejo fue condenado a 20 años durante la ola represiva conocida como la Primavera Negra del 2003, que llevó a la cárcel a 75 activistas de derechos humanos y periodistas independientes. Tras conversaciones en mayo entre el gobernante Raúl Castro y representantes de la Iglesia Católica, 36 prisioneros han sido enviados a España.

Extenuado por el viaje pero a la vez emocionado, Pérez de Alejo dijo que las propuestas del gobierno cubano para otorgar libertad extrapenal a presos políticos en Cuba y facilitarles la salida a España eran un engaño.

"La libertad extrapenal es para quienes en LA cárcel sufren enfermedades, que están discapacitados'', dijo Pérez de Alejo. "Lo que quieren es mandarlos a España porque al gobierno cubano no le queda otra''.

Osmel Rodríguez, amigo de Pérez de Alejo en Miami, lo describió como "un luchador incansable, que da todo a cambio de nada por la libertad de Cuba''.

Antes de ir a prisión, Pérez de Alejo presidía la organización independiente de Derechos Humanos Escambray, recordó Rodríguez.

María Elena Alpízar, una representante de las Damas de Blanco en Miami, organización en la isla que pide la liberación de los presos políticos, destacó la batalla pacífica librada por Pérez de Alejo.

"A pesar del maltrato que ha sufrido, él no se doblegó y siguió adelante por lo que considera una causa noble y justa: la libertad de Cuba'', dijo Alpízar.

En representación de la Fundación Nacional Cubano Americana, Laly Sampedro le entregó a Pérez de Alejo un libro sobre la biografía de su fundador Jorge Mas Canosa.

‘Estamos muy contentos y orgullosos que ahora Arturo se encuentre con nosotros'', comentó Sampedro.