El kirchnerismo ha ido dejando cadáveres políticos a lo largo de sus ya casi 10 años de dominio. Muchos de ellos ahora reviven cuando la presidencia de Cristina Kirchner atraviesa por horas bajas y se unen a los nuevos referentes de antikirchnerismo.
(Especial para Infolatam por Rogelio Núñez)-. En pleno periodo navideño, Cristina Kirchner sorprendió con unas declaraciones en las que viene a sellar su ruptura con ciertos sectores de su propia fuerza, el peronismo, a los que llegó a acusar de estar detrás de los asaltos a centros comerciales ocurridos a finales de año.
La Presidenta no dudó en ver la mano negra de esos sectores peronistas detrás de las caídas de Raúl Alfonsín, Fernando de la Rúa: ”con Alfonsín fueron sectores políticos y del PJ, todos los sabemos … Más allá de los errores y horrores que hubo en esos días por la represión (en 2001), hubo organizadores detrás de eso”.
Cristina Kirchner cree que esa mano negra ahora busca acabar con ella: “se intentó hacer lo mismo en esta oportunidad, pero en un escenario social y político que nada tiene que ver”. Fue entonces cuando reflexionó que “aún suponiendo que estuviéramos como en 2001″, los saqueos no son espontáneos. “Es la articulación de sectores políticos y gremiales con la violencia”.
Las palabras de la presidenta tenían un destinatario muy concreto: el líder gremial Hugo Moyano, aliado del kirchnerismo entre 2003 y 2011 y ahora uno de los referentes opositores.
Las acusaciones de la mandataria provocaron la respuesta del diputado Facundo Moyano, quien cuestionó que el Gobierno involucra “sin pruebas” a su padre y le advirtió que “esto inevitablemente va a tener un desenlace malo”.
Eduardo Duhalde, el primer enemigo del kirchnerismo
Moyano no es sino el último representante de un antiguo aliado del kirchnerismo devenido en feroz crítico. El primer caso fue el del expresidente Eduardo Duhalde mentor del kirchnerismo en 2003 tratando de evitar el regreso al poder de su odiado Carlos Menem. En realidad, el antimenemismo es lo único que unía a estos dos hombres.
Eduardo Duhalde primer aliado y primer enemigo delos Kirchner
Duhalde recordaba en una entrevista en ABC todo el proceso de su cercanía y luego alejamiento en 2005 de los Kirchner,«no, no me arrepiento. El que se arrepiente es el que hace una cosa a sabiendas de que debería hacer otra. La gente, en ese momento, quería dirigentes nuevos, más jóvenes y Kirchner parecía encajar en el perfil».
La colaboración Duhalde-Kirchner se rompió en 2005 cuando el alumno rompió con el maestro: “no lo hubiera elegido si hubiera sospechado lo que iba a hacer. Yo veía a un hombre con mucho ímpetu que defendía bien su provincia… Pero el poder desequilibra a mucha gente y creo que le pasó eso. El poder le enferma, lo mismo le pasa a Cristina. Manejan la plata del Estado de forma insólita. Todo queda entre familiares y amigos y eso no suele terminar”.
Duhalde ve en su historia un precedente de lo que luego ocurriría con Clarín y otros frupos que se han enfrentado a los Kirchner: “me di cuenta de su agresividad, cuando yo presidía Mercosur (Mercado Común Sudamericano) y mi esposa decide ser candidata en las legislativas. Entonces, Cristina dijo que era un complot y se fueron del partido. Empezaron a atacarme, me llamaban mafioso”.
Para el expresidente “luego hicieron lo mismo con el campo (productores agropecuarios) y con la prensa. Actúan igual con todos los que piensan o se manifiestan distinto a ellos. Esto nunca había pasado en Argentina. Inventan enemigos y crecen a costa de ellos”.
La ruptura en el kirchnerismo
Luego el kirchnerismo rompió con Alberto Fernández, quien fue durante mucho tiempo el hombre de mayor confianza de Néstor Kirchner.
Alberto Fernández fue uno de los pilares del kirchnerismo y ahora uno de sus críticos
Todavía el que fuera Jefe de Gabinete recuerda con admiración al expresidente (“Néstor fue un hombre muy importante. Veníamos de la crisis de 2001, del «Que se vayan todos» y él irrumpió con una bocanada de aire fresco. Creo que sus cuatro años y medio de presidente fueron positivos, recibió un país en una situación muy compleja … Lo extraño mucho, sin ninguda duda, desde lo humano y desde lo político”) …
… aunque no tiene la misma consideración con su sucesora: ”Cristina no profundizó el modelo, lo perforó. Ella tiró por la borda todo lo que hizo Néstor. Hay mucchas contradicciones entre los gobiernos de Néstor y de Cristina”.
Ahora, como su antiguo rival -Duhalde- milita en el antikirchnerismo y aspira a convertirse en 2013 en diputado: “soy de los que piensan que uno tiene que tomar del pasado todas las experiencias, buenas y malas. Hubo muchas cosas buenas cuando nos tocó gobernar con Néstor Kirchner y después hubo muchas distorsiones. Los argentinos debemos recuperar un clima de reflexión. No podemos seguir gastando así, tampoco que cada opinión diversa se convierta en un golpe. Siento que es un gobierno que desatiende la vida democrática. Todos empiezan a tener miedo a represalias. Es muy negativo”.
“Cuando el Gobierno no encuentra respuesta, la mejor solución que encuentra es ver quién es el culpable, cada vez que tiene dificultades no busca soluciones sino quién es el responsable, busca a quien atribuirle la culpa”, agrega Fernández en referencia a los asaltos.
Las grandes batallas contra Clarín y Moyano
Con la llegada en 2007 a la presidencia de Cristina Kirchner el ambiente de enfrentamiento y polarización aumentó considerablemente. La Presidenta asumió otro estilo de gobierno, muy diferente a su marido.
En palabras del analista del diario La Nación, Joaquín Morales Solá, “la ruptura del contrato entre la sociedad y su líder era, entonces, inevitable. Cristina tampoco está dispuesta a transigir. Ella es amante de los conceptos, como su marido era un viejo enamorado del pragmatismo político. Néstor Kirchner no hubiera sacrificado jamás una encuesta para quedar bien con un pequeño grupo de fanáticos. Cristina es, en el fondo, una antinestorista de cabo a rabo. Terminó abrazada a los principios y a los modos del peronismo de los años 40 y 50. A ese peronismo irrespetuoso y pendenciero del que se alejó hasta el Perón moribundo de los últimos años. No importa: el último Perón es, para Cristina, un viejo traidor”.
Primero fue el largo y desgastador enfrentamiento con la patronal agraria en 2008 que condujo al enfrentamiento con otro aliado de los Kirchner, el Grupo Clarín.
Héctor Magnetto, el CEO de Clarín, no era un hombre conocido para el gran público hasta que estalló la guerra entre Clarín y los Kirchner. Entonces comenzaron los ataques furibundos. Néstor Kirchner transformó a Magnetto en su bestia negra.
La pugna entre Cristina Kirchner y Hugo Moyano ha fracturado a la CGT
Le calificó de censor “la falta de libertad de expresión viene porque hay una corporación monopólica clara, que se llama Clarín y que tiene su instrumento ideológico en el señor que es responsable de todas las mentiras que se dicen diariamente en ese grupo. Es bueno que la gente lo conozca al rey de la censura, se llama Héctor Magnetto”.
Y hasta insinuó tentaciones golpistas por parte de Magnetto: “estamos siendo sometidos a un verdadero ataque descalificatorio mediático, desinformando a la sociedad y tratando de consolidar una oposición más fuerte para trabar de cualquier manera el proceso que este gobierno lleva adelante…(Magnetto es) uno de los cerebros detrás de la operación destituyente”.
El largo conflicto continúa hasta hoy y se ha convertio en uno de los grandes dolores de cabeza de la actual adminstración.
En su segundo mandato, iniciado en 2011, la ruptura más sonada ha sido con Hugo Moyano. A lo largo de 2012 se ha escenificado primero el alejamiento y luego la ruptura.
Así por ejemplo, Cristina Kirchner aprovechó la semana pasada un acto en homenaje a Eva Perón a 60 años de su muerte para enviar un mensaje al titular de la CGT: ”Por ahí puedo entender que la oligarquía no nos quiera o nos desprecie. Pero no puedo entender cómo uno de nosotros venido desde abajo se junta junto a los que siempre nos atacaron para socavar la unidad de este movimiento. Pero tenemos que ser fuertes, manejar nuestras palabras y también silencios, que pueden ser mas elocuentes que las palabras”, apuntó la mandataria al citar a Evita.
Hugo Moyano ya no esconde su animadversión y le pidió a la presidenta que “imite algo de la humildad” de Eva Duarte de Perón. “Ojalá los que imitan a Evita la imiten en la humildad y dejen de lado la soberbia”, sostuvo Moyano, al tiempo que sentenció que “no se puede decir que sos peronista sino hablás de (Juan Domingo) Perón, que es el creador”.
Todos estos cadáveres que ha ido dejando por el camino ven en 2013 como el deterioro económico y político que padece el país y el gobierno puede devolverles la oportunidad para tomarse venganza primero en las elecciones legislativas de octubre de 2013 y luego impidiendo que Cristina Kirchner fuerce la reelección en 2015.
Tomado de INFOLATAM
|